Cerrada de Utrero
El paraje conocido como Cerrada del Utrero-Linarejos es una asombrosa obra natural esculpida por el Guadalquivir en la roca caliza que lo rodea.
El sendero se recorre a pie, y te permitirá apreciar las afiladas rocas y oquedades creadas por el agua a lo largo de cientos de miles de años. Es un encantador paseo donde el labiérnago, la cornicabra, y el sauce te acompañan hasta uno de los lugares más fotografiados del Parque: la “cola de caballo” o Cascada de Linarejos.
El Guadalquivir labró este cañón estrecho y profundo dejando algunos arroyos –como el de Linarejos- colgados en las alturas. Cuando este arroyo se asoma a la garganta forma la espectacular Cascada de Linarejos, que tras pararse en algunas pozas se une al Guadalquivir para descender hasta el valle.
El sendero mide 1,6 km y en su recorrido circular rodea el “Peñón del Lanchón” para regresar a la carretera en un agradable paseo de unos 45 minutos.
En la parte final del camino –justo antes de volver al asfalto- se llega a un bosque de pino resinero o negral (Pinus pinaster) que fue aprovechado para obtener la resina con la que antiguamente se elaboraba el aguarrás. En estos árboles verás los surcos que los resineros abrían para permitir la salida de esta savia.